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Salve una vida en 60 segundos

Aprenda la manera más simple de suministrar RCP.

In English | Si usted considera que no puede administrar resucitación cardiopulmonar (RCP) en una urgencia porque no ha tomado ninguna clase o porque su certificado ha vencido, piénselo dos veces. Las instrucciones para realizar la reanimación cardiopulmonar se han simplificado mucho durante los últimos años, facilitando su práctica y logrando que sea más eficaz, sin perjuicio de que usted haya recibido una capacitación formal.

Práctica de Resucitación o Reanimación cardiopulmonar (RCP)

Justin Sullivan/Getty Images

Las compresiones torácicas para aplicar RCP se pueden practicar con un maniquí.

Actualmente, existen tres métodos aprobados para administrar reanimación cardiopulmonar y salvar la vida de una persona que está sufriendo un paro cardíaco:

  • RCP convencional, la que se aplica respiración boca a boca.
  • La RCP con compresiones torácicas únicamente (también denominada RCP sólo con las manos)
  • RCP con DEA, que emplea un desfibrilador externo automático (DEA) para administrar una descarga eléctrica en forma segura que impulsa el corazón.

Por diversos motivos, (un esfuerzo, una enfermedad cardiovascular o causas desconocidas) el corazón deja de latir repentinamente y la persona deja de respirar. Sin oxígeno, se puede producir un daño cerebral permanente en tan sólo cuatro segundos e, inmediatamente, la muerte. Sin embargo, la administración inmediata de reanimación cardiopulmonar —incluso practicada por un testigo ocasional sin capacitación— puede mantener con vida a la víctima hasta que llegue la asistencia médica.

De acuerdo con la American Heart Association (AHA, Asociación Estadounidense de Cardiología), en Estados Unidos se producen más de 300.000 paros cardíacos por año fuera de los hospitales y el 80 % sucede en el hogar. A principios de este año, un estudio publicado por dicha organización reveló que el simple hecho de observar un breve video sobre reanimación cardiopulmonar sólo con las manos, les proporciona a los televidentes la suficiente confianza y conocimiento como para administrarla.

En otras palabras, la vida que usted salva probablemente sea la de un ser querido.

El Dr. Michael Sayre, presidente del Comité de Atención Cardiovascular de Emergencia de la American Heart Association resalta que saber RCP es especialmente importante para los adultos mayores.

"La víctima típica de un paro cardíaco es un hombre de 60 años —explica Sayre—. Así que si usted analiza quién estará junto a un hombre de 60 años, ya sea en el hogar, en una cancha de golf o caminando por el barrio, probablemente será su pareja o los amigos de su edad."

Según Sayre, "la principal preocupación de las personas en cuanto a la administración de RCP es el temor a hacerla mal y lastimar a la persona."

Respecto de esos temores, Sayre dice: "Si alguien sufre un paro cardíaco, usted sólo puede ayudar. Es muy difícil empeorar la situación."

Si un rescatista le fractura las costillas a la víctima de un paro cardíaco mientras le practica las compresiones torácicas, debemos tener presente que una costilla fracturada es mejor que la muerte. Y, si la persona que se desvanece no sufre un paro cardíaco y alguien le empieza a practicar reanimación cardiopulmonar, "la víctima probablemente recuperará el conocimiento y le pedirá que se detenga", afirma Sayre.

En caso de enfrentar una emergencia por un paro cardíaco, Sayre aconseja llamar al 9-1-1 (en inglés) y luego administrar RCP lo mejor que pueda. "La RCP permite ganar tiempo —dice— y practicar algún tipo de RCP es mejor que no hacer nada."

La RCP con comprensiones sólo con las manos

La American Heart Association aprobó el uso de la RCP sólo con compresiones en el 2008.

Los estudios han demostrado que esta forma de reanimación (que habitualmente se conoce como RCP sólo con las manos) es tan efectiva como la RCP convencional (que incluye la respiración boca a boca) para ayudar a las víctimas de un paro cardíaco repentino.

A diferencia de una situación de ahogamiento, en la que los pulmones de la víctima están llenos de agua, la persona que se desvanece de repente debido a un paro cardíaco sigue teniendo aire en los pulmones. El uso de compresiones torácicas profundas puede irrigar sangre oxigenada por el cuerpo de la víctima y mantenerla con vida hasta recibir asistencia médica o conseguir un desfibrilador externo automático (DEA).

La realización de la RCP sólo con las manos a una víctima de un paro cardíaco incluye dos pasos muy sencillos:

Llamar al 9-1-1 o pedirle a otra persona que lo haga.

Presionar fuerte y rápido (el objetivo es cien compresiones por minuto) en el centro del pecho de la víctima hasta que el paciente reaccione, llegue la asistencia médica o consiga un DEA (desfibrilador externo automático).

Consejo útil: No es necesario quitarle la ropa del torso a la víctima para administrar RCP. Las compresiones deben ser de una profundidad de dos pulgadas, con tiempo para que el pecho se retraiga entre cada compresión.

La RCP convencional

La RCP convencional, que es en lo que piensa la mayoría de las personas cuando imaginan la reanimación cardiopulmonar, comprende una secuencia precisa de respiración boca a boca y compresiones torácicas.

Sin embargo, a diferencia de lo que sucedía en el pasado cuando la respiración artificial se iniciaba antes de las compresiones torácicas (según la sigla ABC, del inglés para "vía respiratoria, respiración, compresión"), las nuevas pautas de reanimación cardiopulmonar, publicadas en el 2010 utilizan la sigla CAB, del inglés para "compresión, vía respiratoria, respiración".

La RCP convencional a una víctima de un paro cardíaco comprende los siguientes pasos:

Llamar al 9-1-1 o pedirle a otra persona que lo haga.

Administrar 30 compresiones torácicas de dos pulgadas de profundidad.

Revisar la vía respiratoria y realizar dos respiraciones artificiales.

Repetir la secuencia de compresión y ventilación 30:2 hasta que el paciente reaccione, hasta que llegue la asistencia médica o consiga un DEA.

Este tipo de reanimación cardiopulmonar es la mejor opción cuando la víctima ha dejado de respirar por ahogamiento o cuando se encuentra a la persona ya inconsciente (es decir, que nadie la vio cuando se desvaneció) y no respira normalmente.

La RCP con respiración boca a boca también se utiliza habitualmente en caso de emergencias respiratorias en niños, debido a que el motivo por el cual una persona joven deja de respirar generalmente está relacionado con un problema respiratorio y no con un paro cardíaco repentino. (La relación exacta entre compresión y ventilación puede variar según la edad o el tamaño del niño).

Dado que puede resultar difícil exhalar profundamente para respirar por dos personas, se recomienda aprender y practicar la RCP convencional en un salón de clases. Para buscar clases en su localidad, visite los sitios de la American Heart Association o de la Cruz Roja Americana, o póngase en contacto con el Departamento local de Parques y Recreación, u organizaciones que educan y ofrecen servicios para adultos mayores.

Consejo útil: Hoy en día, existen máscaras y protectores faciales para RCP especialmente diseñados para ayudar y proteger a los rescatistas mientras practican la respiración boca a boca. Muchos botiquines de primeros auxilios contienen una máscara o protector de ese tipo o bien es posible comprarlo individualmente en una farmacia.

La RCP con DEA (desfibrilador externo automático)

La causa más común de un paro cardíaco repentino es una fibrilación ventricular, que es una alteración extrema de la capacidad del corazón de latir y bombear sangre. A pesar de que la reanimación cardiopulmonar puede mantener temporalmente el flujo de sangre y oxígeno del paciente, el uso de un DEA (desfibrilador externo automático) es, a menudo, la única manera de restablecer los latidos del corazón en forma permanente.

La intervención de un rescatista con un DEA es, según el doctor Sayre, "parecido a reiniciar su computadora cuando falla el sistema". Sin embargo, para que resulte efectivo, el DEA debe usarse dentro de los tres a cinco minutos de producido el paro cardíaco.

Para incrementar la disponibilidad y uso de los DEA por parte de las personas comunes, los dispositivos se instalan habitualmente junto a los botiquines y a los extintores de incendios que se colocan en la pared en muchos edificios públicos y comerciales, como aeropuertos, centros comerciales y estadios.

Un error habitual sobre los DEA es considerar que sólo los deben usar los profesionales que actúan en caso de urgencia. De hecho, es justamente todo lo contrario. Los paramédicos acuden al sitio de la emergencia con su propio equipo de desfibrilación. Los DEA instalados en lugares públicos son muy similares pero no son iguales a los dispositivos que se encuentran en las salas de emergencia y ambulancias, y que se utilizan con mucha ostentación en las series de televisión.

Los DEA, que brindan instrucciones orales e indicaciones visuales a la persona que ayuda a la víctima, incluyen almohadillas y cables que se colocan en el pecho descubierto de la víctima. El dispositivo analiza la actividad cardíaca de la persona para determinar si es necesario administrar una descarga eléctrica y cuándo.

El Dr. Gordon Ewy, director del Sarver Heart Center de la University of Arizona (en inglés), recuerda que los DEA deben usarse junto con las compresiones torácicas y no en su lugar.

En una situación típica de paro cardíaco en presencia de un DEA:

Llame al 9-1-1 o pídale a otra persona que lo haga.

Realice compresiones torácicas profundas hasta conseguir un DEA, activarlo y, en caso de ser necesario, administre una descarga.

Siga realizando las compresiones torácicas (en una relación de cien por minuto durante dos minutos) hasta que el DEA recomiende otra descarga, el paciente reaccione o llegue la asistencia médica.

Consejo útil: Si usted frecuenta un edificio en particular, trate de detectar dónde se encuentra ubicado el DEA y cualquier otro equipo de emergencia. A pesar de que los DEA son más comunes en ámbitos públicos, los dispositivos pueden utilizarse en el hogar y es posible comprarlos sin receta en farmacias u otros comercios de venta de equipos médicos.

Comparta las tareas de reanimación

Incluso con la ayuda de un DEA, la práctica de la reanimación cardiopulmonar resulta muy difícil para un rescatista. Si alguna de las personas presentes está dispuesta a colaborar, altérnense para realizar las compresiones cardíacas, quizás cambiando después de un minuto o de cien compresiones.